sábado, 27 de julio de 2024


Música para el fin de semana. Siempre me pone de buen humor (y buena falta hace) volver a las Breeders.

La calor, la cosa olímpica, el festival del humor de los jueces... mira, yo ya solo pienso en las vacaciones, es lo que hay.

Días tranquilos (de abanico y cuenta atrás) en el edificio Baxter.

sábado, 20 de julio de 2024

Música para el fin de semana. Cassie Ramone, de las Vivian Girls, tiene disco nuevo, y es una maravilla, como los son las imágenes hipnóticas que lo acompañan.

El verano está ya aquí sin remedio. La calor, las noches infernales, las ganas de morirse. La cuenta atrás para las vacaciones.

Poquitas ganas de contar cosas. Se acaba el disco, darle al play otra vez.

Días tranquilos, de ventilador y abanico, en el edificio Baxter.

 

sábado, 13 de julio de 2024

Música para el fin de semana. Al parecer, el "álbum azul" de Weezer cumple treinta años, treinta (y yo ya no sé si es que de todo hace ya treinta años). Pero mira, me sigue pareciendo emocionante escuchar estas canciones.

El verano está aquí ya con todas las consecuencias. Hubo un tiempo en que eso incluía eso que los periodistas (o los humoristas, no me acuerdo bien) llamaban "serpientes de verano": chorradas que, durante unas semanas, acaparaban comentarios, portadas y entradillas de telediarios y desaparecían luego como humo. A lo mejor lo de Nacho Cano podría entrar en esa categoría. (Todo en él es un poco una serpiente de verano desde hace ya mucho. Con énfasis en la parte de la chorrada que decía.) Ojalá no se esfume todo y le empuren pero bien.

Por lo demás, poca cosa. (Que yo de fútbol no hablo, ya sabéis, y el circo racista de tres pistas que tenemos abierto me da demasiado vergüenza.)

Días tranquilos (y de ventilador a tope) en el edificio Baxter.


sábado, 6 de julio de 2024

Música para el fin de semana. Las Breeders en Big Sur, en modo campestre total. Si esto no os pone de buen humor, chica, yo ya no sé.

Y falta nos hace, que vaya semana. La calor se nos ha echado encima como cuando abres el horno, el circo sigue con todas las pistas full time y mañana en Francia votan después de que en la primera vuelta ganara Le Pen, madre mía qué miedo. (Pero la cosa no es patrimonio de los franceses, que cada vez se ve con más naturalidad que haya partidos medio fascistas, cuando no nazis del todo, en los parlamentos y en las instituciones, y cada vez se van mechando los discursos con sus propuestas más cínicas, y se van asumiendo ideas y conductas que ponen los pelos de punta. Es como un tobogán por el que nos deslizamos poquito a poco, acelerando paso a paso hacia no sé bien dónde. Bueno, sí lo sé.)

Por lo demás, poco que añadir. Me voy a la cocina, que algo habrá que comer hoy.

Días tranquilos en el edificio Baxter.