sábado, 27 de abril de 2024

Música para el fin de semana. Tentado he estado de buscarle algo de Los Planetas a Pedro, para animarle mientras mira la lluvia desde el ventanal de Camelot, pero bueno, al final Sleater-Kinney en un set con cuarteto de cuerda muy cuqui.

Pues lo que decía. Menuda semana de puto asco, madre mía. El festival de embustes, desprecios y manipulaciones, las risotadas de los machotes, los jadeos de la jauría.

Mi refugio estos días, mi lugar feliz, ha sido el nuevo libro de Ana Flecha Marco, un manual para viajeros reacios a salir de casa que habría que llevar siempre a mano para asegurarse al menos una sonrisa al día.

En fin. Días (más o menos) tranquilos en el edificio Baxter. (Waitin' for monday...)




sábado, 20 de abril de 2024

Música para el fin de semana. Yo La Tengo, porque a los clásicos hay que volver siempre. También en primavera. (Y eso que la camiseta de rayas del señor Kaplan tiene un aire otoñal, no sé por qué.)

Pues oye, que abril avanza. Y el tiempo corre. Lo noto mucho cuando miro Youtube o Instagram, porque cada vez me saltan más videos de recetas (y además los miro, y hasta los guardo), y porque cada vez hay a mi alrededor más conversaciones sobre jubilarse (y cada vez me interesan más).

Por lo demás, poca novedad. Bueno, que se acerca el Día del Libro y lloverán las recomendaciones. Yo no digo nada, leed lo que os apetezca. También tebeos, claro. (Sobre todo, tebeos.) ¿Un título? Pues dos: Planeta solitario, el nuevo librito de Ana Flecha Marco. Y Loira, otra maravilla de Etienne Davodeau.

Días tranquilos en el edificio Baxter.


sábado, 13 de abril de 2024

 

Música para el fin de semana. Un poquito de Heavenly para aliviar esta primavera temprana con trazas ya de veranazo. Para mí la astenia es algo vocacional y, más que padecerla, la cultivo durante todo el año, pero estos días me ha caído encima como un camión de ladrillos y ando como a rastras y pegado a las paredes. Qué pereza todo.

Días tranquilos en el edificio Baxter.

sábado, 6 de abril de 2024

Música para el fin de semana. Kim Gordon, señora del ruido. Esta canción ya la subí hace poco, pero escucharla en vivo aquí te deja peinao patrás y con el cuerpo suave suave. Lo mejor para estos días de primavera caldosa que ya prefiguran un verano calentito.

Sin novedad en el frente. Pasó la Semana Santa y la marea de gente ha remitido, pero no tanto. Hubo un tiempo en que un paseo por el museo podía resultar confortable, pero eso quedó atrás. Ahora todo es ruido (pero del otro, el que te expulsa).

Y aquí estamos, en medio del vodevil del novio, en campaña electoral permanente y con el genocidio en Palestina como telón de fondo permanente. Bienvenidos a la distopía.

En fin.


Días tranquilos en el edificio Baxter.